miércoles, 11 de junio de 2008

Familias ensambladas

Es una familia ensamblada una “segunda familia”?
Una familia ensamblada es aquella en la cual uno o ambos miembros de la actual pareja tiene/n hijos de uniones anteriores. Se puede dar el caso de nuevas parejas de viudos/as como de divorciados/as y de madres solteras.
En la actualidad, la mayoría de las familias ensambladas son formadas por divorciados/as con hijos que vuelven a formar pareja, independientemente del hecho de que de este nuevo vínculo nazcan hijos en común.
En la Ciudad de Buenos Aires, acaban de procesar y analizar un nuevo dato que dice que hay más de 35.000 familias porteñas ensambladas
Este tipo de unión, a pesar de incrementarse de manera significativa, no es reconocida a nivel legal en su dinámica más concreta. Es por eso que es una muy buena iniciativa, el proyecto de ley presentado que tiene como objetivo dar forma mediante modificaciones al código civil, a esta realidad que se vive hoy en el seno de las llamadas”familias ensambladas”que precisan el reconocimiento de las instituciones para su protección y valorización.
Entre las variadas reformas al código que busca esta proyecto se encuentra la obligación del cónyuge de apoyar al otro….en el ejercicio de la patria potestad respecto de los hijos propios anteriores a la unión y representarle cuando las circunstancias lo exijan( ej: cuando el padre necesite ser representado por su nuevo cónyuge cuando se encuentre impedido de actuar y fuera necesario hacerlo, tanto para actos usuales como ser la firma de boletines o aquellos que no admitan demora como la realización de una práctica quirúrgica.)
Lo novedoso es la transmisión de la patria potestad al padre o madre afín, en caso de muerte, ausencia con presunción de fallecimiento, privación de la patria potestad o suspensión de su ejercicio de uno de los padres primando el “interés superior del niño”mediante una decisión judicial que lo avale después de ser oído el menor involucrado.
Al hablar de cooperación en el cuidado y educación de los hijos propios del cónyuge, no establece solo deberes, sino también derecho poder cumplir con los actos usuales relativos a la crianza y formación del niño atinente al ámbito doméstico a los efectos de facilitar la vida cotidiana.( En definitiva, eso de no poder fijar las pautas y los límites en la educación de los hijos criados como propios obstaculiza las bases de una convivencia sana. La convivencia con los papás no biológicos siempre esconde el problema de que en una discusión, la salida ante el conflicto por parte de los chicos sea la de contestar: “Vos no sos mi mamá/ papá” .Este punto es fundamental para una buena integración y dinámica de el grupo para que el padre o madre afín no se sientan extraños en su propio hogar. Esta “familia” precisa la fijación de roles y jerarquías para su mejor funcionamiento, tal como en la familia nuclear o de origen.
En el caso de muerte de ambos progenitores la tutela legal corresponderá al padre afín que durante el lapso de vida en común se hubiera hecho cargo del sustento y educación del menor.
Una familia ensamblada no es una segunda familia. Requiere a veces sacrificios por parte de todos los integrantes para poder hacer un vínculo nuevo que no tiene los criterios de funcionamiento de la familia original. Cuesta mucho poder entender eso, y la mayor parte de los conflictos está dada muchas veces por no querer ser crudos y aceptar la realidad de que la vida con un padre/madre no biológicos, no va a recrear la fantasía de la familia idílica que no se pudo tener en el modelo original. Lo ideal, no pudo ser.En un ensamble, tal vez solo queda intentar lo posible, lo más conveniente y lo que de menos insatisfacción a todos..
¿Cuáles son las características salientes de un familia ensamblada?
1*Nacen de una pérdida: Pensemos que salvo que fuera una persona sin hijos que se una a un padre/madre, todos los integrantes del nuevo grupo familiar llegan a esta familia después de la perdida de una relación familiar primaria.
Al hablar de pérdidas, también requerimos mencionar los duelos, que tienen diferente elaboración en cada uno de los afectados. Los adultos cargan con su historia anterior, los miedos, las frustraciones, los cambios, las dificultades económicas y el dolor de los padres que sufren por no poder estar más tiempo con sus hijos.
2Los ciclos vitales son incongruentes: Las necesidades que hay que conciliar son muy distintas. En el caso de un hombre que ya crió a sus hijos y debe hacerse cargo de chicos que están en edad escolar por ejemplo, o de mujeres que no tienen hijos y de pronto deben convivir con adolescentes.
3La relación con los hijos es anterior a la de pareja: Los vínculos son más intensos y si bien, nadie deja a su pareja porque los padres no la aceptan, es más que probable que frente a una mala relación entre la nueva pareja y los hijos, se priorice a los hijos por sobre todas las cosas. Esta realidad implícita genera conflictos de lealtades y celos en la pareja. El adulto que se une a una persona con hijos,puede sentirse en un segundo lugar. En general las personas que han tenido hijos de uniones anteriores se unen a otras después de un tiempo de vivir en un hogar monoparental con sus hijos, generando códigos que dificultan el ingreso de otra/s personas. Nadie quiere cargar con la culpa de quitarle tiempo a los hijos para tener una vida amorosa, pero “lo posible” no es “lo perfecto”, y el entender que no es la familia soñada, que va a ser fantástica una vez que se cambia a uno de los protagonistas puede ayudar a darle a cada uno lo que necesita.La pareja parental, se desgasta por falta de privacidad o tiempo para estar a solas, hay que ponerse en el lugar de quienes aman a una pareja con hijos que no son los propios.
Frente al mito irreal de que el amor es transitivo” si me ama a mí, amará a mis hijos”,o,”si esta persona me quiere, sus hijos lo harán” queda la realidad de que aún si no se desarrollan sentimientos genuinos con el tiempo, al menos pueden ser reemplazados por el respeto y la tolerancia. Por ello festejo la acertada iniciativa de darle un lugar a los padres afines para colaborar en la crianza de los hijos de su pareja y ocupar un lugar que no sea el de un adulto más en la casa. ¿Cómo se fusionan dos organizaciones familiares que pueden disentir en costumbres, tradiciones, normas de convivencia o hasta la manera de disfrutar el tiempo de ocio? ¿Se puede convivir sin tener la posibilidad de fijar los códigos y pautas de conducta en el nuevo hogar?¿Es realmente un disparate permitir que el padre/madre afín tenga derecho a marcar los límites en colaboración con su pareja?
Habrá que ver qué pasa en unos años, cuando estas generaciones criadas en un marco donde es más que normal la formación de nuevas familias tengan que armar las propias.
Los especialistas sugieren que “para un niño tener dos hogares es como tener dos nacionalidades: resulta sumamente ventajoso salvo que los países entren en guerra”.
Festejo por eso la posibilidad de que desde lo institucional se reconozca el fenómeno de estas “nuevas familias”, se otorguen derechos y obligaciones a los padres afines y no se desdibuje su rol, sino por el contrario, se aprenda a sumar-
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2 comentarios:

fernando dijo...

Merlina me gustò mucho como abordaste este tema . Me gustaria que puedas profundizar un comentario que me mantiene intranquilo. Segun la psicologia forense , toda persona que ejerce la prostitucion ha pasado por una vivencia de abuso sexual en su niñez , ya que en el ejercicio de la prostitucion la persona se siente objeto y no sujeto.

Unknown dijo...

Hola, me gustaría saber cuales son las obligaciones de un padre o madre afin, y si en caso particular; deseo contraer matrimonio con una persona que tiene una hija de una relación pasada, pero nunca se casó,sin embargo esta registrada a su nombre; ¿que pasaría si nos casamos y nos vamos a vivir a otro estado por cuestiones del trabajo y de vivienda?